Siempre dicen que un influencer debe ser cercano y amable con sus seguidores. Esto incluye a la prensa, medio que a su vez le ayuda en la promoción de sus redes sociales, sin embargo, Victoria Federica ha hecho caso omiso a esta recomendación. Este jueves 11 de mayo tenía una cita en el Pabellón Satélite Madrid Arena de Casa de Campo, pues participa en la última campaña publicitaria de Multiópticas, lugar en el que estaba convocada la prensa a las 18.30 de la tarde. Una hora concreta en la que se esperaba que Victoria Federica hiciera aparición, sin embargo, ella llegaba con dos horas de retraso, lo que descabalaba los planes de los periodistas allí presentes. A las 20.30 de la tarde la nieta del Rey Juan Carlos llegaba, eso sí, sin ganas de hablar ni tampoco de mirar a la prensa.
Tensa y sin ninguna intención de tener un gesto con la prensa, ha evitado en todo momento cruzarse con ellos. De hecho, el equipo de seguridad hacía lo imposible porque eso no pasara. Solo unos segundos después de posar en el photocall, se iba apresurada sin atender a nadie Con ciertos tintes de desprecio, la cabeza de cartel dejaba a los periodistas plantados, dando igual que hubieran estado dos horas esperando su llegada. Ya no había posibilidad de hablar con ella y es que, por primera vez en muchos años, se negaba también la entrada a la prensa a la fiesta posterior. Nada que ver con la actitud de Ana Obregón y Omar Montes, quienes el pasado año charlaron largo y tendido con todo aquel que quisiera saber de ellos tanto en el photocall como durante el cóctel que se ofreció después.
Esta vez se ha apostado por Victoria Federica, quien se «ha mostrado distante y con malas caras». No ha querido saludar a ninguno de los medios que estaban acreditados y «se ha ido corriendo», lo que deja ver que desde un principio tenía clara su intención. La organización en este caso no ha ayudado a que eso no pasara, a pesar de que habían citado a numerosos medios precisamente para que se hablara con los invitados. Varios trabajadores impedían el paso cuando los cámaras y redactores intentaban hablar con ella, lo que ha hecho imposible que se realizara el trabajo.
Llama la atención que la organización haya pasado por alto que algunos de los personajes que servían como reclamo para los medios hayan decidido no hablar en este acto. Cabe señalar que otros en cambio sí han atendido a la prensa de forma muy amable, nada que ver con Victoria Federica.
Victoria Federica ha tenido varios feos con la prensa, algo que no suele suceder con el resto de influencers. Es habitual que se paren a hablar delante de las cámaras y muestren su cara más amable, un sentimiento que, por cierto, los followers suelen aplaudir. También la mayoría de las marcas, lo que lleva a pensar en ¿le habrán dado un toque de atención por esta actitud? La polémica está servida.