El gran día de Tamara Falcó (41 años) e Íñigo Onieva (33 años) por fin ha llegado. La pareja celebra hoy su boda ante 400 invitados que no se perderán el sí quiero más esperado de los últimos tiempos. Pero antes, la pareja ya ha podido disfrutar de las personas que les acompañarán esta tarde en El Rincón. Ayer por la tarde, Tamara e Íñigo reunieron a algunos de sus invitados en la fiesta de preboda celebrada en el hotel Ritz. Una fiesta en la que no faltaron los detalles exclusivos y en las que hubo risas, reencuentros y muchos nervios.
Los nervios y risas en la preboda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva
Ya desde la llegada de Tamara Falcó, Íñigo Onieva y sus invitados al hotel Ritz de Madrid, se podían percibir los nervios propios de un momento como este. La marquesa de Griñón y el empresario llegaron por separado al evento y con muchas ganas de reunirse con las personas a las que decidieron reunir en este evento previo a su esperado enlace. Una vez dentro, todos se mostraron sonrientes, con ganas de todas estas celebraciones y preparándose para el gran día.
Chábeli Iglesias, que llegó a España tan solo unos días antes de la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, tuvo oportunidad de reencontrarse con familiares y amigos a los que hacía mucho tiempo que no veía. La hija mayor de Isabel Preysler se mostró encantada con formar parte de este instante tan especial para su hermana y charló amigablemente con muchos de los presentes en la preboda.
Entre risas se pudo ver a Alejandra Onieva. La hermana de Íñigo fue otra de las que acudió ayer por la tarde al hotel Ritz para formar parte de esta celebración previa a la boda.
La que tampoco faltó a este evento fue Isabelle Junot. La amiga de Tamara Falcó y mujer de uno de sus primos, Álvaro Falcó, acudió al hotel Ritz tan solo unas semanas después de dar a luz. Con un original look, Isabelle estuvo arropando a la marquesa de Griñón y dentro del establecimiento disfrutó junto a su marido y junto a otros de los invitados.
Otro de los primos de Tamara, Álvaro Castillejo, acudió a la preboda acompañado de su mujer Cristina y se les pudo ver muy cómplices y también charlando amigablemente con algunos de los invitados a la fiesta.
También Eugenia Martínez de Irujo, que acudió al hotel Ritz junto a su marido Narcís Rebollo, se mostró encantada con estar allí y disfrutó de una noche súper especial en la que ya todos contaban las horas para la boda de támara Falcó e Íñigo Onieva.
Ya al terminar la preboda, Tamara Falcó e Íñigo Onieva protagonizaron el momento más romántico. La pareja se despidió con un beso cuando ella se metió en el coche que le llevaría de vuelta a casa.
Un coche conducido por Ana Boyer. Una vez más, no faltó en uno de los momentos más especiales de su hermana y fue ella la que se encargó de conducir el vehículo que les llevó de vuelta a casa.
