Tamara Falcó ha tenido que ver cómo su prometido le era infiel, le mentía y sobre todo cómo toda España y parte del extranjero la señalaban como víctima de una cornamenta monumental.
Pero pocos saben que ésta no es la única situación tensa a la que ha tenido que hacer frente la marquesa de Griñón. De la misma manera que, sin quererlo, se encontró con la infidelidad de Íñigo Onieva, la hija de Isabel Preysler y el marqués de Griñón se ha visto con varios problemas, no tan conocidos y aireados como la deslealtad, y nuestras fuentes señalan a Susana Uribarri como la causante de un quebradero de cabeza que se sumó al alud mediático que sufría en ese momento.
Uribarri aparece como representante de Tamara Falcó, pero en realidad no lo es. No le lleva nada. Es amiga de la familia de toda la vida, negocia con reportajes en revistas como Hola de alguno de sus hermanos, como Julio José Iglesias, y Tamara, por educación y por no hacerle un feo, la deja hacer, pero su representante se llama Chus Martín, que es quien le cierra sus compromisos profesionales y sus entrevistas con los medios de comunicación.
Pero este martes Uribarri tomó unas decisiones que no le correspondían y que han supuesto un serio problema para Tamara Falcó. Tammy tenía una cita ante los medios de comunicación. Era su primera aparición pública después de que decidiera romper con Íñigo Onieva y de cancelar la boda tras confirmarse que los vídeos de su novio besándose con otra mujer eran del pasado mes de septiembre y no de 2019 como él dijo en un principio, tanto a ella como ante los medios.
La expectación era máxima. Hacía tiempo que que no había una convocatoria con tanto periodista y reportero gráfico presente. Todos allí esperando a que llegara para recoger sus primeras palabras. Pero no, no fueron las primeras. Uribarri traicionó a todos los medios que allí estaban esperando y le adelantó las declaraciones a Sálvame, el programa donde el día anterior su presentador, Jorge Javier Vázquez, la había ridiculizado y puesto a parir.
Tamara se dirigía en coche al evento y en el trayecto entre Villa Meona y el Teatro Real junto a ella en el asiento trasero del Audi viajaba Susana Uribarri, que se había ofrecido para acompañarla como amiga. Entonces Jorge Javier llamó a Uribarri por teléfono en directo para que le pasara a Tamara. Uribarri en lugar de negarse amablemente le pasó el móvil a Tamara para que atendiera a las preguntas de Jorge Javier. Y aquella llamada en directo con Sálvame, además del malestar generalizado en el resto de los medios, que estaban aguardando en el lugar y hora que les habían convocado, ha supuesto que tanto desde El Hormiguero como desde la revista Hola haya recibido ciertos mensajes.
Pablo Motos preguntó que a quién se le había ocurrido eso
Informalia ha podido confirmar que el propio Pablo Motos escribió tanto a Tamara como a su representante, Chus Martin. Nos hablan de «mensajes pidiendo explicaciones y diciendo que era inexplicable e inaceptable que Tamara, trabajadora de El Hormiguero, entrara en el programa de la competencia». Así lo afirman personas que pueden corroborar fehacientemente la existencia de los mensajes. «A quién se le ha ocurrido eso y quién lo ha autorizado», preguntó. La respuesta fue sencilla: Susana Uribarri iba en el coche con ella y le pasó el teléfono en directo. El cabreo de Pablo Motos y de los jefes de Antena 3 era notable.
Pero la reacción de la revista Hola no fue menor. Hasta donde sabemos, el semanario había pedido que les adelantara lo que iba a decir para sacarlo ellos en el ejemplar del miércoles (la edición cierra el lunes). Pero su representante le dijo que no podía hacer eso porque era un feo para el resto de los medios. Además, hasta bien entrado el lunes no era seguro que Tamara fuera a acudir al evento. «Eso ya no gustó a la revista», nos dicen, «porque ellos no eran ‘el resto de medios», ellos eran «la revista que llevaba años publicando sus exclusivas, y no digamos de su madre». A esto se suma que no entendieron que no quisiera darles en exclusiva el anuncio del compromiso, aunque, visto lo visto, se han ahorrado otra portada truncada como la de Esther Doña y el juez Pedraz.
Pero cuando vieron que el martes entraba en directo en Sálvame antes de atender «al resto de medios», los teléfonos empezaron a levantarse. Según aseguran a Informalia, los mensajes que llegaron al teléfono de la representante de Tamara no fueron precisamente un ejemplo de cordialidad. «Mensajes irreproducibles», nos dicen. «Lo han visto como una ofensa y un desprecio».
Dos fuegos generados por Susana Uribarri y que no se tenían que haberse producido, y Tamara ha tenido que comerse en plena crisis existencial. Una situación que con Pablo Motos ya ha solucionado, acudiendo el jueves y prestándose a todo tipo de preguntas, estando divertida y proporcionándoles un récord de audiencia.
Un 24% para la reaparición de Tamara Falcó en ‘El Hormiguero’
El Hormiguero de Tamara anotó un 19,8% de share con la marquesa por primera vez en un plató desde su ruptura con Iñigo Onieva. En la franja de coincidencia de El Hormiguero y Pesadilla en El Paraíso, el primero alcanzó un 21,6% frente al 8,2% del reality de Telecinco.Pero es que en el tramo en el que intervino Tamara Falcó la ventaja fue mayor: entre las 22.30 y las 22.55 se disparó hasta el 24,7% y 3,3 millones para esa sección frente al 8,5% del programa de Carlos Sobera en ese mismo momento.
Pero a Hola se la debe
Pero, una vez compensado el desaguisado con El Hormiguero, tarde o temprano Tamara tendrá que hacerlo con Hola, concediendo su primera entrevista de revistas y probablemente gratis. Sin embargo, la que está encantada con lo ocurrido es Susana Uribarri, a la que Sálvame le debe un favor. Eso puede venir muy bien.
