Hasta ahora parece como si a Íñigo Onieva se le hubiera tragado la tierra. Mientras que unas informaciones apuntan a que seguiría encerrado en el piso que compartía con Tamara Falcó en el centro de Madrid, otras aseguran que se trasladó sin ser visto a la casa de uno de sus amigos más íntimos, pero lo cierto es que no existe ninguna prueba gráfica que lo confirme. “Destrozado, avergonzado y muy arrepentido”, así se encontraría el empresario después de que saliera a la luz su traición y el posterior engaño a Tamara Falcó solo un día después de anunciar su compromiso.
Aunque Íñigo Onieva confiaba en recuperar el amor de Tamara Falcó cuando las aguas se calmaran, una reconciliación que para la marquesa de Griñón es “imposible”.
Cuando la vio hablando de él en pasado y con tanta entereza ante las cámaras se le vino el mundo abajo al ser consciente de que la había perdido para siempre. Tras estas declaraciones, el empresario, de 33 años, tomaba una drástica determinación.
Tal y como hemos podido comprobar, el joven ha restringido los mensajes en su perfil de Instagram con el objetivo de aislarse del huracán mediático que se ha creado entorno a su infidelidad.
Lo que es una realidad es que la imagen pública de Íñigo Onieva se ha visto muy dañada en los últimos días. Un temor que preocupa, y mucho, al empresario después de alcanzar una buena posición social tras los dos años de relación que ha mantenido con la marquesa de Griñón.
Mientras Tamara prepara las maletas para poner rumbo a México en las próximas horas para asistir al Congreso Mundial de las Familias donde actuará como ponente, Íñigo Onieva piensa seguir adelante con sus planes más fiesteros. Según anunció Isabel Rábago en el programa ‘Ya es mediodía’, el empresario se unirá en unos días a su grupo de amigos para viajar a Ibiza con motivo de la celebración de los populares ‘cierres’ que se organizan en las mejores discotecas de la isla para poner punto y final a la temporada de verano. Un fin de semana de desenfreno que el empresario no está dispuesto a perderse a pesar de la polémica.
Además, el joven habría descartado por completo volver a casa de su madre o compartir piso con alguno de sus amigos. Íñigo y su entorno más cercano están en plena búsqueda de un nuevo piso donde comenzar esta nueva etapa como un hombre soltero.