No cabe duda, el 2022 ha sido (y es) el año de las rupturas. A solo tres días de Fin de Año, ha sido la propia Isabel Preysler (71 años) quien ha confirmado su ruptura definitiva con Mario Vargas Llosa (86 años). Sin terceras personas ni posibilidad alguna de reconciliación, la socialité se ha limitado a dar la noticia a la revista ¡Hola!, pero ha preferido no dar más declaraciones al respecto. “Agradezco a los amigos y medios de comunicación que nos ayuden en esta decisión”, ha concluido.
Tal y como relata la publicación, fue hace solo unas semanas cuando ambos protagonizaron una fuerte pelea a consecuencia de los celos del Premio Nobel y no dudó en abandonar la casa para instalarse en su piso del centro de Madrid, allí permanece desde entonces sin ninguna intención de volver. Según ¡Hola! esto no era la primera vez que sucedía, de ahí que Isabel Preysler haya tomado la decisión de romper para siempre con la relación.
La última vez que les pudimos ver juntos fue el pasado mes de octubre cuando ambos asistieron a la premiere de la Ópera Aída en Madrid. Por ese entonces, nada hacía presagiar que su romance ya hacía aguas. Desde entonces, ha sido la reina de corazones quien ha seguido con su vida social ya sea en solitario o bien acompañada por alguna de sus hijas.
Los motivos de la ruptura
Según apunta la publicación, los celos infundados por parte del escritor y el desgaste de la pareja debido a los años de convivencia son dos de los motivos principales que les ha llevado a romper su relación de manera definitiva. Parece que la separación ha sido de manera amistosa y aunque ya no tienen futuro como pareja, no sería de extrañar que siguieran adelante con esa amistad que mantienen desde hace décadas.
¿Mudanza inminente de Mario Vargas Llosa?
Aunque Mario Vargas Llosa es un enamorado de nuestro país y aquí posee incluso una lujosa casa, fue su romance con Isabel Preysler lo que le llevó a instalarse de manera permanente en Madrid. Su inesperada ruptura podría suponer también la mudanza del escritor a su Perú natal, donde viven buena parte de sus hijos.