Se publicó que la marquesa de Griñón tuvo que ver en la ruptura y puede que sea cierto en parte: Mario Vargas Llosa se ha referido a Isabel Preysler en alguna de las entrevistas que ha concedido tras el final de su relación. Ahí el premio Nobel negó que en Los Vientos, uno de sus textos, atacara a su ex novia o a su familia y argumentó que estaba escrito mucho tiempo antes.
«Nunca hubiera dejado en ridículo a Isabel», dijo el peruano. Sin embargo, este miércoles la madre de Tamara Falcó estalla y matiza que Mario Vargas Llosa añadió párrafos en ese relato y que los añadidos son dardos directos que atacan nada menos que a sus seres más queridos. «No me voy a quedar callada si se meten con mis hijos», declara en su revista de cabecera, convirtiéndose en una madre coraje para proteger a Tamara. «Ni resentida ni mentirosa, ni molesta ni enfadada. Pero, sí, tengo un límite, y ese límite son mis hijos», advierte en el semanario.
«Mario añadió dos párrafos a su famoso cuento el pasado mes de enero. En ellos, hablaba de las islas marquesas, en referencia al marquesado de Griñón, y se reía de Tamara, una niña que solo ha sido cariñosa y amorosa con él», aclara Preysler. En este relato se puede leer frases como ésta: «La Filosofía comparte el departamento académico con Teología y Cocina. ¡Vaya mezcla! Me imagino el diploma de Doctor en Filosofía, Teología y Gastronomía y me muero de risa», recuerda. «Meterla en todo esto me parece caer muy bajo. Hay un límite para todo y lo han traspasado», señala. Isabel alude a la nueva versión corregida de Los vientos.
Los añadidos de Mario Vargas Llosa que se ríen de Tamara
Como decíamos, Mario Vargas Llosa negó en El País que tuviera referencias autobiográficas y repitió que estaba escrito mucho antes del final de su historia de amor con Isabel Preysler. Pero no contó, como ahora nos aclara la filipina, que había añadido párrafos que, según la viuda de Miguel Boyer, son puro cachondeo contra Tamara Falcó.
El cruce de declaraciones, directas o a través de sus respectivos entornos, no ha cesado entre Mario e Isabel. Y el tono ha ido subiendo. Primero ella comunicó en Hola su ruptura y habló de «celos infundados» del escritos. Después el Nobel contó al escritor Santiago Roncagliolo estaban separados, y que llevaba meses viviendo en un apartamento en Madrid y que el comunicado contenía falsedades, versión que confirma la primera noticia que daba pistas del final de la relación entre Isabel y Mario, adelantada por la revista Semana a finales de junio y negada por ambos en su momento.
Después Isabel Preysler filtró al diario Abc la ya famosa carta que le envió en su día Patricia Vargas Llosa para que no exhibiera en los medios su romance con el escritor, con su marido, hasta que celebraran su 50 aniversario de casados, además de advertirle que ya había habido otras mujeres en el medio siglo de matrimonio. Ahora Patricia, sus hijos y el Nobel han hecho piña en París para acompañarle a la ceremonia de ingreso en la Academia Francesa.
