Gloria Camila no lleva bien la exposición mediática y empieza a pasarle factura. Ha sido objeto de muchas críticas e incluso ha sido objeto de amenazas de muerte. Por este motivo, ayer, la hija de José Ortega Cano ha hablado a corazón abierto sobre lo mucho que le cuesta asumir lo que se dice sobre ella. Lo ha hecho en un acto en Madrid en el que ha recibido un premio y donde ha coincidido con su sobrina, Rocío Flores. «Si alguien se pusiese en mi lugar, creo que me entenderían. Es un poco complicado que me entiendan….He llegado a plantearme si merecía ser hija de Rocío Jurado… He llegado a replantearme esto. Es que me cambio los apellidos y hago una nueva vida en otro sitio», ha revelado.
«Intento explicar un poco cómo me siento, aunque a veces estoy bien, estoy feliz y rodeada de gente que me quiere. El día día también cuesta… A veces te levantas de la cama te sientes una persona de mierda, como que no eres valorada o que no ha merecido la pena lo que has hecho. Es como que no te entienden o que no quieren entenderte. Yo soy muy sensible y todo me lo tomo muy a pecho. Muchas veces me planteo que deberían escuchar la otra parte. Yo tengo mucho que decir y mucho que callar. No estoy bien del todo. A veces tengo unos bajones horribles y me apetece todo mandarlo a tomar viento», destacó Gloria Camila.
«No es fácil que tachen a tu padre de maltratador… todos estos temas al final me afectan muchísimo. Todo el proceso o el trabajo que yo hago día a día, que hago terapia con mi psicóloga, con mi psiquiatra. A veces llego a mi casa explotando llorando después de la terapia y leo un mensaje con amenazas de muerte o haciéndome comentarios racistas como ‘vete a tu país’… todo ese trabajo que yo hago se me derrumba», afirmó la hija de Ortega Cano ante la prensa.