No se habla de otra cosa. Menudo golpe sobre la mesa implacable que ha dado Shakira (45 años) a Gerard Piqué (35 años), a su novia Clara Chía (26 años) y a todo su entorno. La cantante Colombiana ha dejado brotar toda la rabia después de una dolorosísima ruptura y un proceso se separación igual de lacerante. Lo ha hecho en ‘Session 53’ el tema con el productor argentino Bizarrap que ya es todo un himno del despecho amoroso y una de la canciones más importantes de 2023.
Una de las letras que más ha llamado la atención es el mensaje en forma de verso que ha dejado para su suegra, Montserrat Bernabeu (59 años). Unas palabras con las que aclara cuál es su verdadera relación, y no es tan estrecha como se ha dado a entender en los años que ha durado su unión con Gerard Piqué. «Me dejaste de vecina a la suegra», una frase demoledora que nos teletransporta a su casa-búnker a las afueras de Barcelona y que solo está separada por una pared del hogar de los padres de su expareja.
Contemporánea y moderna, el que ha sido hogar de Shakira y Gerard Piqué durante casi diez años, destaca por su buen gusto y equilibrio en la decoración. Se trata de una fortaleza diáfana, de líneas puras y definidas que cuenta con 3.800 metros cuadrados distribuidos en tres plantas de altura y dos subterráneas, que les pudo costar un millón de euros y ahora habría alcanzado en el mercado cerca de 14 millones. El salón principal marca la línea decorativa del resto del hogar: pocos muebles, de altísima calidad, y con el blanco y los tonos neutros de grandes protagonistas, y un enorme ventanal que aporta a la casa gran luminosidad y unas vistas de Barcelona impresionantes.
En otro de los salones, observamos la misma tónica. Los espacios están amueblados con muebles de almacenaje en blanco, los sofás XL, de aspecto comodísimo, invitan al relax. Destacan los puff rectangulares dispuestos en el suelo, y un precioso aparador gris al fondo de estilo rústico, que le da un toque acogedor al espacio. De nuevo, un enorme ventanal, protagonista de una construcción a cuatro vientos y erigida sobre una colina alta en la exclusiva urbanización de Ciutat Diagonal en la localidad de Esplugues de Llobregat, desde donde se alcanza a ver el mar a pesar de la distancia.
La estancia que Shakira menos ha mostrado en sus redes sociales es el dormitorio principal. Sigue la línea minimalista del resto del hogar y está presidido por lo que parece una cama king size, cabecero en madera negra y mesitas de noche modernas de metal y madera.
El espacio de la vivienda de la de Barranquilla que haría las delicias de cualquier amante del arte culinario. Del suelo al techo, todos son armarios de almacenaje blancos y de estilo minimalista. La cocina, que está en la misma planta que el salón, tiene isla central, es de concepto abierto, tiene acceso directo al jardín; electrodomésticos de alta gama y despensa.
Los muebles de almacenaje deslizan lo importante que ha sido para la cantante y el futbolista disponer de espacios multifuncionales. En esta misma tónica, también vemos las estanterías distribuidas por las diferentes estancias, como estas del salón con libros, obras de arte, premios y otros objetos decorativos.
Es posiblemente una de las habitaciones más divertidas de la casa. Robots, naves, juguetes de todo tipo… y, cómo no, mucho mueble de almacenaje. Es la habitación donde sus dos hijos se lo pasan en grande y dan rienda suelta a su imaginación. El salón de juegos está presidido por una televisión enorme y cuenta con una cama por si el cansancio les vence puedan descansar.
Después de nombrarla en el tema que acaba de estrenar con Bizarrap, una ‘bomba atómica’ contra Gerard Piqué y Clara Chía, ha aparecido una bruja en una de las terrazas de la casa de Shakira, y orientada hacia la casa de sus suegros. Muchos han querido ver en este gesto una indirecta hacia Montserrat Bernabeu.
Con toda clase de máquinas, espacioso y diáfano, es el lugar perfecto para entrenar. En el gimnasio, hemos visto a Shakira con su preparadora y coreógrafa preparando las giras.
Al estar en lo alto de una colina, la casa dispone de una gran privacidad y no hay manera posible ni siquiera de ver a Shakira y a sus hijos disfrutando de las diferentes terrazas que hay que cada planta. Cuenta con varias puertas de entrada y de salida que les preserva de miradas indiscretas. Asimismo, conectan directamente con la casa de invitados que cuenta con su propia piscina y un pequeño jardín, que es donde se aloja la familia de Shakira.