La situación de Rafa Mora en ‘Sálvame’ está cerca de llegar a un punto de no retorno. La silla del colaborador corre peligro y su continuidad pende de un hilo después de sus últimas salidas de tono. Sus jefes no están dispuestos a que continúe teniendo una actitud por la que han recibido una oleada de críticas. Y mucho menos que les salpicara por intentar llegar a una solución con él. El programa ha decidido tomar cartas en el asunto y ha puesto sobre la mesa una serie de condiciones que Rafa Mora debería cumplir si quiere continuar cumpliendo su sueño de seguir en “el mejor programa del mundo”. El tertuliano, que atraviesa su peor momento profesional vinculado a ‘Sálvame’ se ha mostrado contrariado y se está planteando su propio futuro al ver sufrir a los suyos, que es lo que más le importa ahora.
La cúpula de ‘Sálvame’ lo tiene claro: o Rafa Mora cambia de actitud y relaja el tono o sus días están contados en plató. Esta ha sido su contundente decisión después de que una encuesta en la que se ha planteado a la audiencia si cree que la presencia del tertuliano es perjudicial para el programa, se haya resuelto con un SÍ demoledor. Un golpe durísimo a su bajísimo estado de ánimo después de una tarde muy complicada este martes.
“Ayer llegué a casa bastante mal, estaba solo, porque Macarena está fuera en Barcelona por trabajo. Empecé a encontrarme mal, tuve ansiedad, me provocó arcadas”, contaba a Terelu Campos y Adela González. Lo ocurrido ha puesto a Rafa Mora en un momento profundo de reflexión donde se está planteando, sobre todo, su futuro fuera de ‘Sálvame’. “Trabajo para estar bien, para ser feliz y que lo sean mis seres queridos”, ha admitido, “sé que las cosas que se dicen, de algunas soy responsable, pero otras no y están haciendo daño a mis seres queridos”.
Su madre, su hermana y su novia Macarena son lo que ahora más le importan a Rafa Mora, a quien se le ha planteado hacer una sesión de ‘coaching’ para ver la situación y su actitud desde otra perspectiva. “Les he dicho que estoy bien, que es normal que estas cosas me afecten y que intenten que no les afecte a ellas porque me estarían obligando a tomar una decisión que no quiero”, deslizaba entonces la posibilidad de marcharse de ‘Sálvame’, y de volver a sus “orígenes”, como guarda portuario. “Yo estoy aquí cumpliendo un sueño, pero si esto va a ser el día de la marmota y lo voy a pasar mal yo y los míos, que veo a mi madre mal, veo a mi hermana mal, a mi pareja, pienso, ¿todo esto es necesario?”, ha manifestado muy desmotivado y desencantado.