Al amor de Elena Tablada y Javier Ungría podría haberle llegado la fecha de caducidad, y es que, si ya se rumoreaba desde hace meses que el matrimonio no pasa por su mejor momento, ahora se ha conocido que la pareja habría decidido darse un tiempo en forma de separación temporal. Es, sin duda, la guinda del pastel a una larga temporada en la que apenas se les ha visto juntos, casi se confirmaba al pasar el verano los dos por separado. Finalmente ha sido Elena Tablada la que confirmaba esa ruptura a sus seguidores mediante un storie.
Al amor de Elena Tablada y Javier Ungría podría haberle llegado la fecha de caducidad, y es que, si ya se rumoreaba desde hace meses que el matrimonio no pasa por su mejor momento, ahora se ha conocido que la pareja habría decidido darse un tiempo en forma de separación temporal. Es, sin duda, la guinda del pastel a una larga temporada en la que apenas se les ha visto juntos, casi se confirmaba al pasar el verano los dos por separado. Finalmente ha sido Elena Tablada la que confirmaba esa ruptura a sus seguidores mediante un storie.
El no compartir nada juntos en las redes sociales cuando siempre se han mostrado muy cariñosos, ya hizo saltar las alarmas, y es que no ha sido por falta de planes: sólo en las últimas semanas hemos podido ver a Elena disfrutar del festival de música Mad Cool, de un viaje con sus hijas a Disney World y de su último viaje a la playa. De todo ello ha compartido la modelo bonitas fotografías, pero Javier no está ni se le espera en ninguna de ellas. Eso sí, parece que Elena se ha refugiado en sus amigos y en sus hijas -Ella y Camila-, de las que sí ha compartido fotos en su cuenta de Instagram, donde le siguen más de 200.000 personas. La última foto juntos de la pareja fue el 18 de marzo, cumpleaños de él que, demás, casi coincidió con el día del padre.
La relación de Elena Tablada y Javier Ungría parecía de cuento y daba la impresión de que iba a durar para siempre debido a lo cariñosos que se mostraban siempre en público. Los dos empezaron a salir en 2016, y tan sólo dos años después, en 2018, estaban celebrando su boda en La Habana (Cuba). Otros dos años después, en pleno confinamiento de 2020 por la pandemia, nacería Camila para, otros dos años más tarde, romper así la relación. Sólo el tiempo dirá si la vida les vuelve a unir o si romperán definitivamente después de este ‘impasse’.