La salud de María Teresa Campos atraviesa un momento delicado, tal y como sus propias hijas y nieta lo han confirmado en los diferentes programas de televisión en los que colaboran. La veterana presentadora no acudió este año a Málaga durante la Semana Santa, una visita que era imperdible para ella cada año.
En su nombre estuvieron Terelu Campos y Alejandra Rubio. «Con el amor de mi vida viendo al Cautivo por el puente de la aurora. Ella este año no está, pero nosotras estamos en su nombre para darle las gracias por darnos Salud (con mayúscula) para poderlo ver en procesión y para rezarle que la cuide todos los días», escribió la hija mayor de la periodista junto a una foto desde su balcón.
Para las hermanas Campos lo fundamental es que su madre, de 81 años, esté tranquila y recibiendo todos sus cuidados en su casa de Madrid. «Todos estamos tristes, pero mi madre sigue con nosotros, eso es lo que importa», ha declarado Carmen Borrego a los micrófonos de Europa Press.
La preocupación por María Teresa aumentó especialmente después de que sufriera una caída durante las pasadas fiestas navideñas. «Tuvo una caída de la cama el día 31. Vino un médico a casa y solo tenía dolor muscular, pero como seguía quejándose, hemos querido hacerle una serie de radiografías», declaraba Terelu en aquel momento. «Está un poco débil porque come poco», y tras someterla a unos análisis, se le ha diagnosticado una «anemia controlable», añadía. Tras esto, las hermanas Campos decidieron que lo mejor era contratar a una cuidadora para que estuviera al lado de su madre cada día.
Sin trabajo y sin Edmundo
Desde la ruptura con el humorista chileno Bigote Arrocet en 2020, la situación personal de María Teresa ha pasado por momentos muy complicados. Otro punto de inflexión complicado que le costó digerir fue su salida de Mediaset. Su último trabajo fue en 2021, aquel de La Campos Móvil, donde entrevistó a Isabel Díaz Ayuso, que fue retirado de nada más comenzar.
María Teresa clamó y puede decirse que hasta entonó un grito de auxilio diciendo que deseaba sentirse «ocupada y no estar casa sentada» cuando la entrevistó Anne Igartiburu en Telemadrid: «A mí eso me está haciendo mucho daño».