El todavía matrimonio da pasos de gigante para hacer oficial su separación cuanto antes. Las negociaciones están siendo amistosas y por ello este lunes, nueve días después de anunciar su ruptura definitiva, han conseguido elaborar el primer borrador. En él se recoge, entre otras cosas, que Ana María Aldón abandonará la casa conyugal y se mudará a una vivienda muy cercana a esta.
Tampoco hay prisa, tal y como han comentado los dos en varias ocasiones. La prioridad es su hijo y que este mantenga su colegio y sus amigos, por lo que Ana María se está tomando tiempo para encontrar el mejor hogar dentro del mismo en el barrio.
El borrador contempla otras cuestiones. Según José Antonio Avilés, Ortega Cano y su todavía esposa han acordado que no habrá pensión compensatoria para ella. Sin embargo, el torero se hará cargo de todos los gastos derivados del hijo que tienen en común: colegio, médicos, etc. El tertuliano afirma que, salvo alguna anotación o especificación de última hora, el acuerdo será firmado en la próxima semana.
El matrimonio, que se dio el “sí, quiero” en 2018, no ha podido superar una crisis que comenzó hace ya un año, coincidiendo con la emisión del documental Rocío, contar la verdad para seguir viva. Ana María, que nunca fue del todo aceptada por la familia del torero, reclamó públicamente su sitio y comenzó un declive que les llevó a poner distancia física a principios del verano. Tras unos meses de reflexión, Aldón ha puesto punto y final a su relación: “Cada uno por su lado”.
