Las malas lenguas son fulminantes: “Yulen Pereira se está aprovechando de Anabel Pantoja para abrirse camino en televisión y el mundo del famoseo”. Así de claro se pronuncia un miembro del equipo de “Supervivientes” que conoce muy bien al espadachín de origen cubano.
Las malas lenguas son fulminantes: “Yulen Pereira se está aprovechando de Anabel Pantoja para abrirse camino en televisión y el mundo del famoseo”. Así de claro se pronuncia un miembro del equipo de “Supervivientes” que conoce muy bien al espadachín de origen cubano.
En su lugar de residencia, la localidad madrileña de Las Rozas, vive Antonio G., quien nos descubre que “ese chico es un ligón empedernido, le gusta mucho flirtear con las mujeres, y eso de que no ha tenido relaciones en mucho tiempo es mentira”. Y una camarera que le ha visto con frecuencia en el local en el que trabaja, añade que “va de santito y las mata callando”.
Anabel tiene la mosca tras la oreja, y la pasión que exhibía por el deportista en la isla hondureña se empieza a ir difuminando. De hecho, no se lo ha llevado con ella a Sevilla, considera que es pronto para presentarle en familia. Esa duda será por algo. ¿Qué está viendo en ese hombre que le frena los ímpetus pasionales? Y qué sensación le produjo ese reencuentro con su todavía marido, Omar Sánchez, ¿le removió los sentimientos? El fantasma de Omar “El Negro” sigue planeando en la vida de la sobrinísima. Y dicen que incluso le molesta que el canario pudiera estar saliendo con Raquel Lozano. Un sinsentido.