“Cuando las miradas de amor infinito no necesitan palabras. Quién me iba decir a mí que 30 años después estaría dando el biberón a tu hija, mi Aless. Ojalá siguieras aquí con nosotras. Ojalá el cáncer no te hubiera robado el derecho a vivir, ojalá perdones desde el cielo a los que ahora niegan el derecho a vivir de tu hija. Y a ti, mi Anita, te cuidaré y te protegeré, nunca te faltará mi amor inconmensurable ni nada económico, porque para eso tu abuela trabajó 40 años, esperando que tu papá lo heredara algún día y solo espero que cuando seas mayor rodeada del amor de todos tus primos, de tus 11 tíos, de tu abuela y de tu papá en el cielo seas una mujer fuerte, feliz, generosa, solidaria y sana, y que perdones como yo lo he hecho a los que te negaron tu derecho a vivir. Gracias mi Anita, por devolverme la vida”. Son las palabras que dedica Ana Obregón a su hijo Aless y a su hija-nieta Ania junto las fotografías de ambos mientras ella les da el biberón. La de la niña está tomada estos días mientras que la del fallecido Aless es de hace casi 31 años
Las imágenes son una auténtica preciosidad, con la ternura de dos bebés preciosos mientras Ana les alimenta. Pero Ana va mucho más allá del lenguaje maternal y lanza un dardo a quienes han no han opinado que esté haciendo lo correcto. “Espero que cuando seas mayor (…) perdones como yo lo he hecho a los que te negaron tu derecho a vivir”, dice la actriz. También se defiende de quienes cuestionan la diferencia de edad que la separa de su hija-nieta, nada menos que 68 años, recordando que estará “rodeada del amor” de sus primos, sus “11 tíos”, de su abuela “y de tu papá en el cielo”, añade.
Expertos como el ex Defensor del Menor Javier Urra o el psiquiatra forense José Cabrera han criticado con la mayor contundencia a Ana Obregón. El primero dijo que “Ana Obregón ha comercializado con una vida y destruido la intimidad de una niña” y el segundo ha dicho que “ha traspasado todas las barreras éticas, morales y legales” con lo que ha hecho. Pero ahora Ana arremete contra los discrepantes y les acusa de ser “quienes que ahora niegan el derecho a vivir de su hija”. Curiosa interpretación.
El abuelo Lequio no está para Ana Obregón entre quienes ella anota como futuros protectores de su hija-nieta
Ana Obregón en ningún momento hace referencia a Alessandro Lequio quien, si creemos lo que dice la actriz (que la niña es hija de Aless), es nada menos que el abuelo de la bebé llegada al mundo por gestación subrogada.
La actriz sigue en Miami, disfrutando de los primeros días como madre y abuela. Pero no puede decirse que se mantenga alejada de los medios de comunicación porque ha sido protagonista de dos portadas hasta ahora y no cabe duda de que al menos para la segunda de ella se ha prestado, la ha cobrado y ha posado junto a la pequeña, como en la imagen que difunde ahora, esta sin cobrar. Termina el texto con unas palabras dedicadas a su nieta, en las que promete cuidarla y protegerla con su vida.
La ausencia de cualquier referencia a Alessandro Lequio se suma a las sospecha que ha levantado la actitud del supuesto abuelo de la criatura.
El marido de María Palacios en ningún momento ha felicitado a Ana Obregón por su maternidad, al menos públicamente. Al contrario, las últimas imágenes del aristócrata, tomadas este fin de semana junto a su esposa y su hija Ginevra en Galicia nos mostraban una imagen de ambos muy seria, con semblantes muy distintos de de los que se ven en familiares que acaban de conocer una buena nueva. Lequio dijo en un principio que la sabía todo, para después matizar que se estaba enterando de cosas. Pero después ha mantenido un prudente y educado silencio que, sin embargo, ha dado lugar a interpretaciones. El que calla otorga, suele decirse y, en este caso, el silencio del italiano a estas alturas es atronador.
Fuentes de toda solvencia consultadas por este portal pueden confirmar que no es que que haya mala o buena relación con Ana Obregón: “Es que no hay ninguna”, nos aseguran. Desde el entorno del bisnieto de Alfonso XIII se observa preocupación al ver el cariz que están tomando los acontecimientos: “Ana está tratando de arrastrar a Alessandro Lequio públicamente a su vida”, añaden nuestras fuentes. Este domingo, un periodista dijo en Telecinco que “Ana Obregón habla todos los días con Lequio”. Sin embargo, estamos en condiciones de afirmar que eso es radicalmente falso.
¿Por qué Lequio no es apellido, no tenía el permiso del abuelo?
Si, como se ha publicado, Lequio pidió a Ana Obregón que no llevara a cabo sus planes pero ella siguió adelante por encima de su voluntad, la responsabilidad de quien parece ser su abuelo le ha sido impuesta. Lo cual es tema de reflexión. Tal vez eso explique por qué la bióloga registró a su hija en el documento de adopción con el nombre compuesto de Ana Lequio y el apellido de Obregón, tal y como avanzábamos el pasado 1 de abril. Después ella dijo en Hola que la pequeña se llama Ana Sandra, pero jamás matizó si Lequio es apellido o simplemente nombre.