Como una diva ha llegado Ana Obregón este domingo a la Feria del Libro de Madrid. Rodeada de escoltas y de su gran amiga y representante, Susana Uribarri. La actriz ha firmado ejemplares de su libro El chico de las musarañas, donde cuenta cómo vivió los meses de tratamiento de su hijo y recoge, según ella, escritos que había dejado Aless antes de morir. Una versión con la que Alessandro Lequio no está de acuerdo.
La bióloga y los miembros de su editorial, Harper Collins, solo han repartido 150 tickets entre las personas que esperaban en la cola para poder recibir la firma de la autora. Así consta en la web del evento.
Obregón ha firmado en La Rosaleda, un espacio excepcional del madrileño parque del Retiro que reservan para contadísimos autores. Para la ocasión, Ana ha escogido un vestido largo de color fucsia con bordados florales. El luto por su primogénito se lo quitó tras el nacimiento de su hija-nieta, Ana Sandra, que vino al mundo por vientre de alquiler el pasado mes de marzo.
Es la segunda reaparición pública de la protagonista de Ana y los Siete tras volver de Miami. Este miércoles 7 de junio convocó una rueda de prensa para presentar su libro ante los medios en el hotel Palace de Madrid. Desde ahí, le envió alguna que otra pullita al padre de su hijo y abuelo a la fuerza de la pequeña Ana Sandra.
