Ana Obregón se encontró este miércoles 26 de abril un extenso mensaje de Mercedes Milá defendiendo la decisión de la actriz de convertirse en madre-abuela a través de un vientre de alquiler (ilegal en España) y las muestras del esperma congelado de su hijo fallecido hace alrededor de tres años.
«Si había apoyado a Ana sin conocer su historia de primera mano, tras conocerla, mi apoyo es aún mayor», escribió la ex presentadora de Gran Hermano en Instagram tras leer el libro que comenzó a escribir Aless Lequio y que terminó su madre, El chico de las musarañas.
«Sabemos que Ana ha cumplido la promesa que hicieron los dos a su hijo pocos días antes de morir y mediante gestación subrogada o vientre de alquiler, con el esperma que Aless dejó, ha nacido una niña que es su nieta, una preciosidad de niña», añadió Milá.
La protagonista de Ana y los 7 le respondió este jueves con un story en Instagram: «Querida Mercedes, gracias por tu empatía. Gracias por todo lo que has escrito. Gracias por entender el corazón mutilado de una madre donde solo existe el inmenso amor por cumplir los deseos de su hijo».
La presentadora de ¿Qué apostamos? recurrió al método de la gestación subrogada en Miami porque en España es ilegal. La niña nació el pasado 20 de marzo y, tras las fotos de Obregón saliendo el Memorial Regional Hospital, en silla de ruedas y con la pequeña en brazos, se abrieron varios debates: el de la moralidad de utilizar el cuerpo de otra mujer a cambio de una compensación económica, uno de ellos.
El de la edad de la actriz, 68, para comenzar a hacerse cargo de una criatura, otro debate. Además, la propia Ana ha dado entender que podrían venir hermanitos para la pequeña Ana Sandra Lequio Obregón. Tras perder a su único hijo biológico hace tres años, hay quien también cuestiona su estado psicológico para convertirse en madre legal de un bebé. «Llegó una luz llena de amor a mi oscuridad. Ya nunca volveré a estar sola. He vuelto a vivir», fueron las primeras palabras de Obregón tras conocerse la noticia.
La artista explica en su libro que esta era una de las últimas voluntades de su hijo y que así se lo transmitió tanto a ella como a Alessandro Lequio. No obstante, el conde italiano todavía no ha confirmado el relato de Ana: ni que su hijo pidió ser padre ni que el semen salió de Nueva York.